jueves, 6 de diciembre de 2012

Serendipia

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Viernes, 6 a.m.

- ¿Cómo queres que te tome enserio si llevas puesta esa remera? -
- Jajaja, no seas idiota Rodrigo - Acepto la condena, llevaba puesta una remera que decía "Zorra" en letra mayúscula y para colmo en color verde flúor.
- Mira si vas a salir con eso a la calle.. - Me miró riéndose.
- Basta -
- Pero, jajajajajajaja ¡Sos una ridícula! -
- Basta -
- Deci basta una vez mas y te como la boca -
- No seas boludo, basta -
- Te lo dije - Se inclinó a besarme.
- Sabes que lo quiero mucho al otro... Estás arruinando nuestra amistad -
Esa fue la primera y la última vez que besé a Rodrigo, no fue nada bueno, no fue nada del otro mundo. La única vez que considere tal vez tener algo con él fue cuando hablaba conmigo de manera seria y como amigos, me caía muy bien, era una de las pocas personas que me caían bien la primera vez. Juro que solo lo veía como un compañero de porrones, un amigo al cual contarle mis problemas, alguien con quien estudiar y tomar unos mates. Solo eso.
Creo que tal vez el hecho de que fuera amigo de Bruno hacía que quisiera que fuéramos solo amigos, o tal vez no me atraía físicamente. Él no era para nada mi tipo, un chico común, amante del rock nacional, tranquilo, callado a veces, no me gustaba como se vestía... Seguro era esa la razón.
Recuerdo que el día que me besó nos encontrábamos en la puerta de casa, sentados hablando en la entrada. Yo estaba tan ebria que no recordaba ni mi nombre. Solo recuerdo ese momento porque insistí que no más de una vez. Le dije que me interesaba mucho su amigo; y que a él solamente lo quería como un amigo gay. Sí, dije gay, lo quería para que me aconsejara solamente (obviamente sobre Bruno).
Creo que el no entendió la indirecta (directa) y entendió lo que quería. Cada vez que memorizo el momento recuerdo haberme enojado con él y decirle que no me tomaba nada enserio, que yo realmente lo quería a su amigo, que no seríamos más amigos.
Se fue algo triste de casa, pero yo ya había advertido que no quería nada con él.

martes, 4 de diciembre de 2012

Sostengo que sos mi paz

A los conocidos no se te va a hacer difícil olvidarlos, con tus amigos va a costarte muchísimo más, pero si tratas de olvidar o perder (inconscientemente) a un hermano va a ser imposible.
Es tan difícil deshacernos de esas personas importantes, es tan jodido aceptar que aunque a veces los queramos matar se nos va a volver imposible. Es muy duro pelearte con un hermano y que no te duela; Y si no te duele nunca fue alguien importante en tu vida.
El orgullo es el peor enemigo de las personas y aunque nadie acepte ser orgulloso, todos lo somos (unos más que otros). Tal vez te tome una semana, un mes, tres años o una eternidad, pero acepta tu error, acepta que no siempre vas a estar en lo correcto. Acepta a tu hermano y seguí adelante (junto con él, obvio).
Se dice por ahí que los amigos son hermanos de diferentes padres, se dice que son nuestros compañeros eternos (obvio después de nuestra familia). Se dice que ellos siempre van a estar ahí a pesar de que los puteemos, les peguemos y les digamos cuanto los odiamos.
Perdí un par de hermanos en la muy corta vida que llevo. Hoy, no quiero perder ninguno más; Y no me perdonaría nunca perder a un compañero así.
Aunque te diga que te quiero pegar. Siempre vas a ser esa parte mía buena, mi complemento, eso que caracteriza nuestra amistad, la sinceridad, la alegría, los pocos (pero importantes) momentos. Risas, llantos, golpes, abrazos, borracheras, secretos nos caracterizan. No voy a dejar eso por un berrinche, esta vez no me lo voy a dejar pasar. Los otros amigos siguen acá, pero que vos no estés duele demasiado.
Te amo siempre hermana.

PD: Te sigo extrañando, volve. ¡Perdón! (Busca la canción, odias al artista). 



lunes, 3 de diciembre de 2012

Lagrimas


No hace falta estar en uno de "esos días" para llorar desconsoladamente y gastar una caja de pañuelitos descartables. No hace falta una excusa para llorar con una película o una serie. No creo que necesite toneladas de helado para parar de llorar. 
A veces creo que lloramos con estas cosas por el miedo a sufrirlas o tal vez luego de haberlas pasado. Solemos reaccionar a las muertes de una manera muy dura y difícil de superar; pero, mentiría si dijera que no lloré con muertes ficticias (sí, muertes de televisión). 
Creo que la muerte es la mejor explicación de lo poco que somos, de lo caducables que podemos llegar a ser. Hoy podemos estar, mañana tal vez no. Vivimos el día a día como si nunca se fuera a acabar nuestra vida, nos volvemos parte de la rutina, no valoramos todo eso que nos rodea. Tal vez lleguemos a sentir que nos vamos a tener toda la vida; Es una decepción saber que no va a ser así siempre.
Se que extraño a personas que perdí en mi vida, pero cada vez que hago algo que alguna vez tuvo que ver con ellos trato de disfrutar.
Será que mi abuela amaba las series policiales y de misterio, será tal vez ese amor incondicional que siempre tuvo por la lectura, esa facilidad que tenía a la hora de vestir y lucir hermosa, será que siempre pensaba en los demás y luego en ella, será que extraño que llame a casa mil veces al día para preguntarme como estábamos. Siempre fue mi guía, soy lo que soy gracias a ella, a su apoyo. 
Hace ya casi tres navidades que extraño su compañía.
No estoy orgullosa de haberla llorado tan poco, se merecía más reconocimiento del que le doy.
Simplemente gracias a una de las mujeres más importantes de mi vida. ¡No olvides que te extraño!